Hoy se celebra el Día Mundial de Acción para acabar con las inversiones explosivas, impulsada por la Cluster Munition Coalition (CMC). El objetivo de la jornada es hacer un llamamiento a los gobiernos para que sus legislaciones prohíban invertir en la fabricación de bombas en racimo y presionar a los bancos y a otras instituciones financieras para que dejen de invertir.
La Fundació per la Pau, Justícia i Pau, el Moviment per la Pau, la Plataforma per la Pau Lloret y Setem, miembros de la CMC, se suman a esta jornada con el lanzamiento de la página Web www.stopinversionesexplosivas.org.
Además, las ONG están en conversaciones con la Comisión de Defensa del Congreso para conseguir que en la nueva ley española sobre bombas en racimo quede expresamente prohibido todo tipo de financiación de estas armas, tanto por parte de las entidades financieras que operan en territorio español, como de las entidades españolas con inversiones en el extranjero.
La legislación española
El 1 de agosto de 2010 entró en vigor el Tratado de Oslo que prohíbe las bombas en racimo. El Estado español fue de los primeros en firmarlo y ratificarlo pero ahora nos encontramos en un momento clave del proceso: durante los próximos meses la legislación española incorporará las modificaciones necesarias para introducir el articulado del Tratado.
La prohibición incluye la producción, el almacenamiento y la comercialización de las bombas en racimo en el Estado español pero también debe exigir con firmeza que incluya un elemento de vital importancia para su producción: la financiación.
Entidades financieras españolas han financiado y podrían estar financiando empresas productoras de bombas en racimo en países que no han firmado el Tratado de Oslo, lo cual es inaceptable en el marco del propio Tratado.
Momento decisivo del proceso legislativo
En marzo de 2011 se presentó una proposición de ley de modificación de la ley 33/1998 sobre la prohibición total de las minas antipersonales. Con esta modificación se pretende unificar criterios y conceptos en relación a la regulación de la prohibición de las minas, las bombas en racimo y las armas de efectos similares de tal manera que una única ley cubra todos los aspectos relacionados e incluya cualquier tipo de armas que produzcan los mismos efectos, también en el futuro.
El contenido de la proposición es bastante completo. A pesar de ello, las entidades civiles queremos que el texto relativo a la prohibición de la financiación sea más contundente y claro para evitar cualquier vinculación de entidades financieras españolas o que operen en el Estado, con estas armas.
La proposición de ley.
Información sobre la campaña: www.stopinversionesexplosivas.org.