Las informaciones periodísticas que indican que el Ministerio de Defensa promoverá la adquisición de armamentos por valor de 10.000 millones de Euros nos parece un anuncio profundamente irresponsable.
La seguridad de las personas y pueblos descansa fundamentalmente en la generación de las condiciones que les permitan llevar a cabo sus necesidades, en un entorno de libertad y justicia. Para ello, hacen falta muchas acciones políticas y no adquisiciones de sistemas militares.
La gran mayoría de amenazas a la humanidad no tienen que ver con la variable militar. Y las que tienen esa dimensión (conflictos enquistados, terrorismo, etc.) precisan fundamentalmente y sobretodo de respuestas políticas, ambiciosas y coordinadas.
Por todo ello no podemos comprender, ni aprobar, la insistencia en continuar fabricando ‘seguridad’ a base de ejércitos, gasto militar y armamentos.
Más grave aún es este anuncio si, como ahora, nos encontramos en un contexto de grave crisis económica y de recortes en el acceso a los derechos básicos y fundamentales para la dignidad humana como la vivienda, la sanidad, la educación o la cultura.
Y es definitivamente incomprensible hacerlo cuándo, aún hoy, el gobierno español afronta una deuda altísima (un total de 30.000 millones de euros que en su mayoría no han sido aún satisfechos) por adquisiciones anteriores de armamentos.
Por todo ello pedimos al Gobierno, a los partidos políticos, a los movimientos sociales y a la ciudadanía que hagan todo lo posible para rectificar esta decisión.